Seguro que te ha pasado: estás en el trabajo y, a media mañana, comienza a rugirte el estómago. Como no tienes nada que echarte a la boca, pillas lo primero que encuentras, aunque sea poco saludable ¿Verdad? Apunta estos snacks con pocas calorías para esos momentos de desesperación.
1.- Arándanos: los sueles tener frescos o deshidratados en el supermercado, pero, si están frescos, mejor que mejor. Una taza de esta baya contiene 84 calorías además de más nutrientes, y te saciará rápidamente.
2.- Un huevo cocido: ya se pueden comprar directamente hervidos, por lo que te evitas el tedioso proceso de tener que andar cociendo un huevo a media mañana. Si le echas un poco de pimienta como condimento te sabrá bien rico.
3.- Uvas: te pueden refrescar y sacar de un apuro hambriento. Un truco: si las congelas, puedes conservar mejor todas las propiedades antioxidantes que tiene su piel. Por cierto, cuanto más rojas sean las uvas, mejor.
4.- Frambuesas: al igual que los arándanos, este tipo de baya es muy beneficioso para la salud, ya que ayuda a descender los niveles de acidez en la sangre. Además, te quitarán el hambre.
5.- Quinoa: para llevártela ya hecha desde casa, una ensalada que combine lechuga con quinoa puede ser ideal para comer a esas horas entre el desayuno y la comida.
6.- Yogur con avena: si puedes llevarte un pequeño taper con un par de cucharadas de avena y una cuchara. El yogur por otro lado y, cuando sea la hora, lo juntas todo y tan rico. Si a esto le sumas unas fresas cortadas en trocitos, más delicioso aún.
7.- Tres mandarinas: aportarán a tu dieta el azúcar natural necesaria para mantenerte sin hambre durante unas horas más y llegarás a la hora de la comida sin tanta ansiedad por comer.